La pista que une la comunidad de La Pita, en la desembocadura del Lempa, con el ya asfaltado cruce de San Carlos, se inunda en temporada de lluvias por las crecidas del río. Dicen que en ese momento incluso se puede salir a la carretera a pescar.
Esta noche ha llovido ‘duro’ y el firme se presenta bastante deteriorado, aunque no lo suficiente para detener el escaso tránsito rodado, y mucho menos a las vacas que se atraviesan en el camino.
Llaman la atención algunas cruces al borde de la pista. “¿Accidentes de tráfico?”, preguntamos. La respuesta es justo la que no queríamos oír. “Más bien accidentes humanos, temas de pandillas y sicariado”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario