La banda sonora de la revolución suena en San José de la Montaña

Por Carmen Novas y Laura L. Ruiz

La escuela de San José de la Montaña es bastante ruidosa. Niñas y niños juegan al fútbol en la cancha, mientras otros saltan por los corredores y las más pequeñas juegan a las cartas basándose en reglas que sólo ellas conocen. No es el ambiente ideal para gravar un programa de radio, pero lo prioritario es que el alumnado se muestre participativo, y para eso también hace falta cierto dinamismo.

Más de 30 estudiantes se han apuntado a la charla de Agareso, aunque apenas una veintena de voces se escucharán en el programa final. Algunas risitas de fondo se amparan en la multitud, pero cuando llega la hora de la verdad se nota que han preparado el tema y que lo conocen muy bien. Han elegido hablar de las inundaciones que cada año anegan no sólo el centro escolar, sino toda la comunidad, obligando a evacuar a la población.

Hay jóvenes que incluso participan en el comité de emergencias y nos explican cómo es el proceso. Los más chiquitos cuentan que en el albergue se divierten porque llegan payasos y hacen nuevas amistades, mientras que otros se quedan en la casa con sus papás para cuidar las pertenencias y el ganado. Incluso el profesorado se atreve a pasar por el micrófono. El maestro David Minero nos hace ver que el ser humano es el principal culpable de los desastres naturales. Por su parte, la directora Mary Antonia Mercado comparte con el auditorio la experiencia de grandes llenas como la provocada por el huracán Mitch en 1998, cuando aún no tenían sistemas de alerta.

La mayoría de los talleres de radio ambiental impartidos por Agareso en el Bajo Lempa se desarrollan en el departamento de San Vicente, en comunidades que tras los acuerdos de 1992 fueron repobladas principalmente por ex combatientes de la guerrilla. Sin embargo, San José de la Montaña se sitúa en el departamento de La Paz, y en el entorno predominan asentamientos de antiguos soldados y paramilitares. No obstante, el alumnado de San Bartolo ha escogido musicar ‘Así suena el Lempa’ con una canción que constituye todo un emblema de la revolución en Centroamérica: ‘Las casas de cartón’.